Hoy en clase de Educación del Movimiento ha venido un ex alumno de Víctor a hablarnos del miedo que a veces sentimos de hacerlo mal o hacer el ridículo delante de los compañeros o por otros motivos... Pues bien, ha sido mucha casualidad porque justo hoy he tenido un incidente con la policía nacional en el metro que lo he relacionado con la clase de educación del movimiento, pues me he acordado del cuerpo vivencial, más en concreto del cuerpo dominante del policía nacional.
Eran las 11:30 de la mañana cuando he abierto la puerta del metro y allí estaban, tres policías nacionales, vestidos de uniforme, con su placa y su pistola. Al entrar al vagón me han mirado con cara de circunstancia y he supuesto que era por mi paraguas; si si un simple paraguas con el mango con forma de rifle, pero un simple paraguas. Al acomodarme en un asiento han venido directos hacia mi pidiéndome la documentación y preguntándome si había estado detenido alguna vez... Cogen el paraguas y empiezan a analizarlo, tratándome como si fuera un criminal que iba a realizar una masacre en el metro. Me dicen que no puedo llevar ese paraguas por la calle porque puede simular un arma de verdad... Al sacar el móvil y realizar una foto a los policías de espaldas, se giran y gritándome me dicen que borre enseguida esa foto, que me van a multar con trescientos euros por ese delito tan grave, así que borro la foto en el acto y les digo que no se volverá a repetir. Acto seguido uno de los policías me dice que soy un tonto y un provocador y se bajan del metro mirándome como si me pudieran matar con la mirada y siguen su camino.
Cuando los policías se bajan del metro me ha venido a la mente el cuerpo dominante que dimos en clase. Este tipo de cuerpo lo vemos como un medio para dominar a los demás, un cuerpo que hace sentirnos superior a los demás y hace utilizar la agresividad o cualquier otro modo para conseguir aquello que se quiere, y efectivamente, hoy he sentido miedo al ver a los policías de aquella manera, de esa forma agresiva y un tanto chula por llevar una pistola y una placa y presumir de ser la autoridad ha hecho que dominaran sobre mi en todo momento. ¿Es esa la función de un policía?, ¿Asustar a los ciudadanos en vez de velar por su seguridad y respetar a la gente de la calle?, yo creo que no, que no se trata de ser un cuerpo dominante, sino un cuerpo comunicativo que puede dar tranquilidad y confianza a los demás.
Se que no tiene mucho que ver con la educación, pero si con el miedo que hemos visto hoy en clase. El ex alumno de Víctor ha puesto un ejemplo de una niña que sentía miedo de su profesor y este le dijo que se aguantaba, que el era el profesor y que no iba a cambiar porque a ella le diera miedo.
No por llevar una placa y una pistola tienes que ser más que nadie ni sembrar miedo entre los ciudadanos, ya que la función de un buen policía es tranquilizar a los ciudadanos y respetar a estos, no hablarles con este tono de soberbia y prepotencia con el que me han hablado esta mañana.
Muy, muy interesante reflexión! Creo que has capatado la esencia del tema.
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